5 errores cosméticos (que tampoco deberíamos cometer)

¡He vuelto! Sí, lo sé. Algo más de dos meses sin escribir y sin avisar... no tengo perdón. Os preguntaréis dónde me había metido y la respuesta es simple: he tenido que reorganizar mis prioridades y tomar aire antes de seguir avanzando. Estudiar y trabajar es equiparable a hacer encaje de bolillos y si le sumamos tener un blog como hobby, la cosa se complica. Lo importante, pero, es que estoy aquí de nuevo con muchas ganas de dar guerra. ¿Preparadas?

El post de hoy es la segunda parte de 5 errores cosméticos (que no deberíamos cometer). Ya sabéis que no soy mucho de hacer continuaciones, o más bien que siempre acabo saltándomelas aunque me comprometa a ellas . Pero este es uno de estos posts que no me cansaría de hacer, desgranando poco a poco mitos que leo/oigo cada día. Y como en el post anterior, la entrada viene acompañada de 5 productos que me encantan relacionados con cada punto. Como la última vez nos quedamos en el 5, hoy toca continuar con el error nº6:

Caudalíe Sérum SOS desalterante (29,30€) | Vichy emulsión solar SPF50 matificante (12€) | Decléor Aromessence Ylang Ylang (53€) | Armonia Bio Agua Micelar (12€) | Kiehl's Epidermal re-texturizing micro-dermoabrasion (46€)

6. Uso solo sérum y no me hace falta hidratante: exceptuando casos muy concretos el sérum no debería aplicarse solo ya que está pensado para penetrar rápidamente en la epidermis y actuar de un modo mucho más efectivo que una crema. La hidratante posterior, adaptada a cada tipo de piel o necesidad, genera una barrera de protección además de preservar la humedad de la piel. Y lo que es peor: utilizar el sérum como hidratante, ¡es tirar el dinero!

7. Como soy morena/ya estoy morena, no me hace falta usar protección solar: aunque las pieles bronceadas tarden más tiempo en quemarse, eso no significa que la radiación UV no les afecte. El 90% de los efectos del envejecimiento son debidos al sol: pérdida de firmeza, aparición de arrugas, manchas... ¡A protegerse!

8. Mi piel es grasa/mixta, así que debo usar productos oil-free: aquí hay mucho de que hablar, y ante cualquier duda siempre hay que consultar al dermatólogo o especialista de la piel. Por ejemplo, si la piel está muy deshidratada necesitará un mínimo de aceites. Y si tiene tendencia acnéica, buscar productos no comedogénicos. Aun así, depende mucho de cada caso, pero mi recomendación es no descartar los aceites aunque nuestra piel sea una fábrica de sebo. El árbol del té, el geranio, la lavanda, el ylang-ylang... son ejemplos de aceites astringentes, seborreguladores y antimicrobianos que ayudan a las pieles mixtas, grasas o con imperfecciones.

9. Como no me maquillo no hace falta limpiar la piel por la noche: ¡gran error! Polución, células muertas, exceso de sebo... llevan acumulándose en la piel desde que salimos de casa obstruyendo los poros e impidiendo que la piel se oxigene como es debido. Aunque sea con agua micelar, debemos limpiar la piel en profundidad al llegar a casa. Y lo ideal, es seguir con el tónico y una crema adecuada a nuestro tipo de piel y necesidades.

10. Exoliar la piel hace que aparezcan manchas: sí y no, si exfoliamos la piel de una forma intensa y con algo fotosensibilizante (por ejemplo con un peeling químico con retinol) y después nos exponemos al sol sin protección solar, la piel será más sensible a la radiación y lo más probable es que salgan manchas. Y respecto a los otros exfoliantes, del tipo mecánico, no solo no provocan manchas sino que ayudan a eliminarlas, pues aclaran la superficie de la piel y además permiten que los productos que tratan las manchas penetren de forma adecuada.

Confesadlo: ¿habéis cometido alguno de estos errores?