Cuando lo pruebes (bien) lo adoptarás como método exfoliante favorito
Desde que he redescubierto la exfoliación en seco que mi piel es otra. Porqué sí, sabía que existía y de vez en cuando utilizaba un cepillo corporal, pero no lo hacía bien.
Empezando por la elección del cepillo.
Estos 3 trucos que te convencerán para que pruebes el dry brushing si aún no lo practicas. Estoy segura de que no has pensado en todos ellos.
Qué es el dry brushing
El eje vertebrador de un buen cepillado en seco es, ¡el cepillo! No todos son iguales. Y Andrea, de Made in Tribe, me lo ha demostrado regalándome el cepillo corporal para pieles sensibles de Per Purr.
Antes usaba el primero que pillaba. Normalmente de cerdas sintéticas. Pero cuando pruebas uno bueno, ya no hay vuelta atrás. El cepillado en seco se transforma en un ritual efectivo y fantástico. Menudo cambio, te lo aseguro.
Hay cepillos más o menos suaves, con cerdas de diferentes materiales, para usar en seco, en mojado o en ambos casos.
Este es para pieles sensibles o embarazadas, con cerdas de agave (la planta suculenta de la que se extrae el sirope para endulzar). Es redondo y tiene una cinta elástica para que sea más cómodo.
Cuándo se recomienda hacer dry brushing
Aunque se recomienda tanto antes como después, prefiero el cepillado en seco antes de la ducha. La diferencia es abismal. Salgo de la ducha con la piel ultra-suave y limpia, y con una necesidad imperiosa de hidratación.
Porque es muy importante hidratar la piel si has hecho dry brushing, idealmente con un aceite.
Lo aplico con la piel húmeda, masajeando. Y después seco la piel a toques. Mi nueva incorporación es el aceite antiox de Per Purr.
Contiene aceite de almendras dulces, avellanas, jojoba y açaí, además de aceites esenciales de romero, salvia y geranio. Una delicia. Tiene un olor intenso, herbal.
¿Y cuántas veces a la semana? Depende del cepillo y de como tengas la piel ese día.
Cómo se hace el cepillado en seco
Tiene su lógica. Uno de las principales beneficios del cepillado en seco es que mejora la circulación. Por eso vale la pena centrarse unos segundos en pensar cómo lo hacemos.
Empezando por los pies, hacia arriba, con movimientos largos en las piernas. Circulares en la zona de las nalgas y abdomen, y otra vez largas pasadas en los brazos.
Debemos ejercer una ligera presión, firme, pero no dolorosa.
Me gusta insistir en rodillas, codos y detrás de los brazos (donde suele tener algo de keratosis pilaris, ese granulado duro tan típico de esa zona). Quedan suaves, y absorben los productos hidratantes en un plis plas.
Me gusta insistir en rodillas, codos y detrás de los brazos (donde suele tener algo de keratosis pilaris, ese granulado duro tan típico de esa zona). Quedan suaves, y absorben los productos hidratantes en un plis plas.
Cuéntame, ¿practicas el cepillado en seco? ¿Tenías en cuenta estas claves?
Gracias, Andrea, por abrirme las puertas al mundo del (buen) cepillado en seco corporal :)
Gracias, Andrea, por abrirme las puertas al mundo del (buen) cepillado en seco corporal :)
Los productos mencionados han sido proporcionados por la shop online Made in Tribe. Consulta mi Código de Confianza.
Oh my God! No lo había pensado nunca esto, ¡menudo descubrimiento nena! Ya te conté que yo tengo eso de los brazos y aunque ahora me ha mejorado mucho, tomo nota por si vuelvo a estar más "jodida" hacer ésto. La verdad es que tiene que dejar la piel... que da gusto por lo que cuentas.
ResponderEliminarun beso limoncín!
Tengo un cepillo corporal y he probado el cepillado en seco, pero ya hace tiempo que no lo practico. Tengo que animarme a hacerlo de nuevo.
ResponderEliminarUn beso, guapa :)